Piedra de ágata dendrítica tamaño aproximado 4 cm por 2-3 cm en collar ajustable de 70 cm
Ágata dendrítica
Cura las molestias provocadas por los desequilibrios de los chakras. El ágata resuena con todo lo que se ramifica en el cuerpo, como los vasos sanguíneos y los nervios. Trata el sistema nervioso, neuralgias, trastornos óseos. Alinea el esqueleto con la realidad física del individuo. El ágata dendrítica revierte la degeneración capilar y estimula el sistema circulatorio. Colocado sobre una herida o un punto doloroso, alivia el sufrimiento. Estabiliza los vórtices del campo energético de la tierra y puede superar el estrés geopático.